Domingo en casa

He muerto hoy igual que ayer, en el infierno caí despues de conocer el paraiso, dulce tentasión de rojo color, sangre como fuego, fugaz sentir el de los hombres que se llaman asi mismos humanos y se portan como ferocez animales, llanto triste y deshonrado, hipocrita risa de domingo en la tarde que alegra el día de otros, mientras las entrañas se pudren en el basurero que hay dentro, de la abundancia del corazón habla la boca, de la vida que pasa frente digo yo es lo que hay, no espejos, no mascaras, solo la arides de frente, vacia y partida la tierra, sin agua, sin vida, sin nada.

Hogar de muertos que se pasean de un lado a otro, sin verse a la cara, trantado de olvidar lo que sucede, queriendo dejar de existir, quieren ser invisibles, pobres miserables y debiles somos todos, ni una pizca de fortaleza, todo en vano, sin razon de seguir, no oigo, no oigo, soy de palo.

Chantaje depresivo y patetico el ataque de asma y los multiples desmayos, las huidas en la troca de un ser que siente puede todo y nada enfrenta, y el alma que queda dentro soteniendo lo que queda, cansada y debil esta ya del espiritu, como confortarlo si no tiene energia, ni una pila le queda, ni siquierea una estension para conectarle a una fuente de energia alterna, talvez el circuito se ha daño para siempre.

Una luz, si una luz que esta al final de este tunel obscuro, como llegar hasta ella, hay que pasar muchos obstaculos, muerto el perro se acabo la rabia, pero por lo pronto ya mordio a muchos, que mas sigue.

Hogar dulce hogar...?!